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Escuela de EGOS

Llegamos al final de este año 2020 y con muchas ganas de dar la bienvenida al 2021, que esperamos sea un año mucho más esperanzador y lleno de noticias positivas. La pandemia del coronavirus ha marcado nuestras vidas y muchos hábitos han cambiado. Surgen nuevos modelos de negocio y el auge online está más presente que nunca.


Este año tan difícil me ha regalado tiempo para hacer todo aquello que antes me era casi imposible. Una asignatura pendiente era escribir este blog, dado que me apasiona la comunicación por defecto profesional, nada mejor que apostar por una herramienta informativa y útil para hablar de comunicación digital. ¡Hoy os damos la bienvenida a la generación Yo!


En los 40 posts que he publicado he hablado de marketing digital, contenido digitaltendencias en redes socialesneuromarketing, entre otros aspectos de interés; pero se me ocurrió cerrar el año con un post que he titulado "Escuela de Egos" en alusión a esta era del "yoísmo" y el uso de las redes sociales.


¡Todos hemos caído! Incluso, yo. ¡Quién esté libre de culpa que tire la primera piedra! Para empezar debemos saber que ego en latín significa "yo". En psicología se refiere al "exceso de valoración que uno tiene de sí mismo". 


El narcisismo online


Actualmente, disponemos de las redes sociales para autopromocionarnos. Los medios de comunicación dan notoriedad o hacen importante a un deportista, político, artista o ejecutivo en función de algún acontecimiento relevante; pero hoy en día, bye bye. Pero, si todos podemos ser famosos y hacernos selfies para compartirlos en estas plataformas sociales.


¿Por qué esta conducta narcisista se ha convertido en una tendencia normalizada? Hay que presumir de vacaciones, premios, dietas, bikinis, y así seguiría con un largo etcétera. En esta cultura de ego desmedido, también se han generado problemas de ansiedad y depresión. Pero, ¿cuándo podría decirse que existe un trastorno narcisista de personalidad de forma severa? 


¡Horror!, y sí lo repito de nuevo, ¡Horror!. Las redes sociales parece que son nuestro espejo. Aquí mostramos cómo somos o deseamos vernos ante los ojos de los demás. Lo que está claro, es que alimentan el ego hasta desbordarse. Pero, ¡alto!. ¿Acaso Facebook, Instagram, Twitter, entre otras redes no se crearon para facilitar la comunicación y darnos a conocer? Correcto. Pero, entonces ¿hasta qué punto importan los demás? Si lo que queremos es presumir de gustos, familia, imagen, y sobre todo, éxito social. Primero, somos nosotros y luego, también.


Escuela de egos

Individualismo radical y vanidad desmedida

Si la bruja de Blancanieves hubiera nacido en esta época no pararía de preguntar en el muro de Facebook "Espejito, espejito mágico ¿quién es entre todas las damas de este reino  la más hermosa?" Y luego a esperar sus likes, comentarios y reproches. 


En fin, ya sabemos que los seres humanos somos vanidosos por naturaleza. Pero eso sí, unos más que otros. Obviamente, alimentar el ego de forma controlada, y de vez en cuando, no es algo malo. El problema surge cuando el ego explota y las redes sociales nos hacen vulnerables. ¿Serán las redes sociales el paraíso de los narcisistas? Lo que sí queda claro, es que este individualismo tan radical, lo han generado las nuevas tecnologías. 


Nos guste o no, estamos ante unas plataformas de comunicación que han disparado la egolatría. Se lanzan indirectas, se muestran los éxitos, se comentan los enfados, se liga, se rompen relaciones, ¡stop y digo stop! El narcisismo online es mucho. ¿Dónde está la barrera entre la confianza y el ego desmedido, que encierra ciertas carencias y debilidades? 


No cabe la menor duda, que si queremos estudiar sociología, tan solo debemos darnos unos paseos diarios por las redes y observar, eso sí, con mucho detalle. No es para menos, que los departamentos de Recursos Humanos de las empresas no se centren ya tanto en el currículum, sino en el historial y pistas que dejamos en estas plataformas sociales.


En esta era digital han cambiado muchas cosas, pero también los valores. Nos enseñaron que hay que promulgar la humildad, que ciertas cosas no se muestran y que, si no tienes algo cerrado o definido, no lo cuentes. Bueno, pues algunos no solo cuentan lo que no existe, sino que se hacen unos pájaros mentales dignos de estudio psiquiátrico. 


Ante esta nueva generación y actitudes, sería necesario crear una "Escuela de Egos" para corregir ciertas disfuncionalidades y obsesiones innecesarias en estas aplicaciones, donde existe una barrera muy fina entre la verdad y la mentira; la apariencia y la realidad; el ego y la necesidad de compartir porque la comunidad internauta realmente está esperando que le cuentes algo sobre ti.


Llega el 2021 con nuevas tendencias en Redes Sociales y ahí que estar, claro cómo no vamos a estar ahí si se conectan millones de personas al día. Pero, "no pasa nada si la gente piensa que eres Dios, el problema viene cuando empiezas a creértelo", tal como dice el gurú, John Baldoni.


Amigos les deseo FELICES FIESTAS y un FELIZ AÑO 2021. Como siempre te digo, si te gustó el post, no dudes en compartirlo en redes sociales o internet. ¡Así alimentas un poquito más mi ego!😉

                      

                                                                                                     Alicia Luengo 💕

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