El debate de si las tecnologías de la información y la comunicación (TIC) deben tener protagonismo o no en la educación ha terminado en apenas unos meses, en los que todo el sistema educativo español ha tenido que asumir su presencia en exclusiva en el desarrollo de clases y trabajos de los alumnos.
Por ello "ese debate ha terminado", ha explicado la especialista en didáctica y profesora de la Escuela de Tecnología Educativa en Competencia Digital de la Universidad Internacional de La Rioja (UNIR), Ingrid Mosquera.
Hasta la suspensión de las clases educativas con motivo del estado de alarma por la crisis sanitaria del coronavirus "ya había muchos profesores que utilizaban plataformas educativas", pero "la mayoría de los docentes han tenido que preparar recursos por su cuenta".
"Lo que se les ha ofrecido a los alumnos ha dependido de cada profesor, de su propio interés y de la destreza técnica que tuvieran", asume Mosquera, quien recuerda que, "hasta hace poco, en los colegios había pocos ordenadores y algunos centros, incluso, no tenían internet".
De hecho, en su opinión, ahora el debate se centra en "qué pueden o qué deben hacer los profesores" porque, "en estos últimos meses, la metodología ha sido muy dispersa, ha habido quien ha funcionado a través de whassap, por correos electrónicos, plataformas....".
Para ella, sería el momento de avanzar en cómo ofrecer recursos a distancia a los alumnos de una forma más homogénea, "pero tampoco soy optimista en eso".
"La realidad es que muchos profesores han aprendido más en un mes sobre competencias digitales que en diez años", ha asegurado, y, "quizá, es eso con lo que nos podemos quedar".
Porque "la educación ya no va a ser solo presencial y los profesores van a tener que utilizar cosas que, en la mayoría de los casos, no utilizaban".
No obstante, considera que, para el futuro, "hay que definir mejor" cómo se abordarán estas cuestiones, en especial cuando se reanuden las clases.
Se ha referido a que "se habla de que solo vayan a clase la mitad de los alumnos, por turnos,..." pero "si eso es así, va a haber el doble de profesores", se pregunta, "porque también habrá que trabajar con los que se quedan en casa".
Para avanzar en ese camino, "hay que formar a los docentes en las herramientas que tienen a su disposición" porque "las hay muy sencillas y gratuitas" y, "tras un primer momento en el que cada uno salió por donde pudo, hay que empezar a trabajar de forma más estructurada".
